La burocracia celestial
“…
Los devotos invocan a Dios y le ruegan que interceda a su favor como quien llama a un servicio de urgencias. Y Dios no está para esas cosas, no puede, no da abasto. La jerarquía celeste está colapsada:
Los serafines, encargados del papeleo, se pasan la eternidad tocando el arpa; los azules querubines revolotean graciosamente en lugar de hacer llegar las demandas a las escalas más bajas de la jerarquía celestial. […]
Total, para que después no contemos más que con uno o dos ángeles destinados para atender a los desconsolados de una ciudad mediana, típico de un sistema excesivamente burocratizado. Pobres devotos, están en manos de los eternos funcionarios.
…”
En Ecce ego de Armando Vitale.
eheeehheh!!