«Está generalizada la convicción de que si uno se encuentra ante un sabio se da cuenta. Pero lo cierto es que nada garantiza que un necio vea absolutamente nada de lo que no esté ya persuadido de antemano. Un necio no tiene porqué ni cómo darse cuenta de nada. Si el necio no piensa que está ante un sabio, simplemente no lo ve.»

Reflexión de un psicólogo en un podcast.